Los invertebrados terrestres como las lombrices de tierra están expuestos a una contaminación potencial a través de los cuatro medios (aire, agua, suelo, plantas) con:
- exposición elevada mediante el suelo y las plantas;
- exposición media mediante el agua superficial y de filtración;
- exposición baja mediante el aire (polvo).
La evaluación encontró que tanto los individuos como las poblaciones pueden resultar perjudicados ante una exposición baja o aguda (como la actual), lo que les vuelve extremadamente vulnerables a concentraciones de campo realistas, es decir las concentraciones que se encuentran en los cultivos. Estos efectos varían desde una modificación de la conducta, como la incapacidad para alimentarse, hasta la mortalidad.
Estas especies proporcionan un sinfín de servicios al ecosistema, incluyendo la regulación y el ciclo de nutrientes, el almacenamiento de carbono y el apoyo al crecimiento de las plantas, y dependen de comunidades biológicas diversas y complejas que se encuentran en el suelo.
